El castillo de Balmoral es la residencia vacacional de la familia real británica en Escocia, Reino Unido. Está situado en el concejo de Aberdeenshire, a 50 kilómetros de Aberdeen. Es el principal atractivo turístico y motor económico de la región. Recibe más de 80000 visitantes cada año, especialmente en primavera y verano. En otoño es ocupado por la familia real.
El castillo de Balmoral consta de 20000 hectáreas, repartidas entre los territorios de Balmoral, Birkhall, Glen Doll y Corgarff, en las montañas Grampiam. Quienes lo visitan tienen la oportunidad de recorrer las instalaciones, salas, exposiciones y jardines, comprar algo en la tienda de regalos o la cafetería. O bien, participar en las posibles excursiones a las montañas que rodean el edificio. Su territorio está compuesto en parte por el bosque de Ballochbuie, zona especial de conservación designada (ZEC).

Reservorio natural y vistas increíbles
Ballochbuie es una de las áreas continuas más grandes que quedan del bosque nativo de Caledonia. Unas 20 hectáreas fueron compradas por la reina Victoria en 1878, para la conservación de la masa forestal autóctona. En 1979 el príncipe consorte Felipe de Edimburgo dirigió personalmente los trabajos de expansión, llevando las 20 hectáreas originales a 300 hectáreas.
Otras 200 hectáreas del castillo de Balmoral son cultivadas y explotadas para la cría de bovinos serranos, raza de ganado autóctona. Y otras tantas son empleadas para el desarrollo de programas de protección de la fauna local, en especial de ciervos rojos.
Una residencia con historia
El castillo de Balmoral se convirtió en residencia real en 1848, cuando la reina Victoria y el príncipe Alberto compraron los terrenos a la familia Farquharson. Contrataron entonces arquitectos que diseñaron nuevas oficinas, cabañas y edificios auxiliares.
La reina Victoria y el príncipe Alberto ordenaron la instalación de una casa prefabricada de hierro que sirvió de sala de baile temporal y comedor. Y mejoras en los edificios de la finca, jardines y el bosque. Una vez creció la familia real y su respectivo servicio, hicieron construir una nueva casa 90 metros al noroeste del edificio original. Los trabajos se realizaron entre 1853 y 1856. Una vez terminados, se procedió a la demolición del antiguo castillo, que según los registros había sido erigido a finales del siglo XIV.
El actual edificio, categoría A, de estilo baronial escocés, está hecho de granito de las canteras locales de Invergelder. Presenta dos alas principales, cada una con patio interior, y alberga una torre de reloj de 24 metros de alto rematada por torretas.
Los extensos jardines que lo rodean son un oasis de belleza natural, con macizos florales, árboles majestuosos y senderos pintorescos que invitan a pasear y disfrutar de la tranquilidad del entorno. Los entusiastas del aire libre pueden disfrutar de actividades como senderismo, pesca y observación de vida silvestre en los terrenos del castillo y sus alrededores, lo que hace que la visita sea una experiencia inolvidable.
Ten en cuenta que el Castillo de Balmoral fue la residencia vacacional favorita de la Reina Isabel II del Reino Unido y también el lugar de su fallecimiento el 8 de septiembre de 2022. Visitarlo será un acto enriquecedor.